miércoles, 30 de noviembre de 2011

AGUANTE RUSITA !!!


Vuelve a ser noticia la rusita favorita de este blog: Anna Chapman.
Ya les contamos que integraba el grupo de espías más torpe de la historia (ver por acá). Descubierta y deportada, volvió a su patria y recibió ofertas para dedicarse a la política y a la pornografía (ver por aquí). Pero ella fue más práctica y decidió facturar sin quedar incinerada: se convirtió en algo así como una estrella mediática. 

Así fue como se sacó la ropita para una sesión de fotos de la revista Maxim (que pueden ver aquí) y logró ser contratada como anfitriona de un programa televisivo ("Secretos del mundo con Anna Chapman"), donde su aureola de espía le sirvió para investigar diversos misterios y leyendas urbanas rusas.


Como quien dice, no le estaba yendo nada mal. Y ahora vuelve al candelero, por varios motivos.
Para empezar, el FBI decidió hacer públicos los videos de vigilancia del grupo de espías que integraba Anita.

No es que haya mucha cosa interesante en esos videos. Tengan en cuenta que el grupo operó por espacio de casi diez años, sin poder aportar nada de interés a Rusia desde el punto de vista militar, económico o político.

Todos los integrantes del círculo de espías eran personas comunes y corrientes, llevando vidas de clase media en USA (por ejemplo, Anita trabajaba como corredora de bienes raíces). El propio FBI estiró y estiró el momento del arresto de los involucrados, esperando que surgiera ese dato, ese contacto, esa "revelación" que detonara la situación. Cosa que nunca pasó.

En todo caso, los agentes encargados de seguir y vigilar a Anita, tuvieron casi diez años de tarea diaria agradable...




Otra razón por la que la espía rusita volvió a ser noticia es porque (una vez más) recicló su carrera.
Esta vez, volvió a sus fuentes. Puesto que tiene estudios de finanzas se enroló en el Banco FSB, una institución que capta inversores y financia proyectos vinculados al Estado ruso, como por ejemplo los vuelos aeroespaciales.

El nivel de confianza que dicho banco ha depositado en Anita es alto. Baste decir que es la responsable de una selecta gacetilla de información financiera exclusiva, que circula entre los grandes clientes.

¿Será que esa es su movida definitiva? No me parece. Todos los antecedentes indican que la rusita es inquieta y emprendedora. Por lo tanto, creo que vamos a tener más noticias de ella.

Mientras tanto, vamos a ver más fotos de Anita.





Y para que no digan después que este post es sólo para filibusteros babosos y degenerados, les dejé para el final una imagen tierna:

domingo, 27 de noviembre de 2011

VARGINHA, EL ROSWELL DE BRASIL



Varginha es una ciudad de unos 120.000 habitantes, situada en el estado de Minas Gerais (Brasil).
Se convertiría en centro de un episodio nunca aclarado, que dio lugar a múltiples rumores e interpretaciones. Para muchos, el caso Varginha fue el Roswell de Brasil.

Todo empezó el 20 de enero de 1996, cuando el señor Eurico Rodriguez y su esposa, granjeros en la zona rural entre Varginha y Tres Caracoes, notaron el enorme nerviosismo que mostraban sus animales esa mañana. Todos parecían incontrolables.

Puesto que los perros ladraban con furia, Eurico pensó que algún intruso estaría merodeando su propiedad. Salió entonces de la casa, dispuesto a investigar un poco. Pero cuando alzó la vista al cielo, casi quedó petrificado: un extraño objeto volador pasaba por su propiedad.



Eurico llamó a su esposa a los gritos. La señora acudió y ambos vieron, por espacio de varios minutos, lo que luego describirían como:

"Un objeto gris, parecido a un submarino, del tamaño de un microbús, que volaba muy despacio por sobre el campo. No tenía luces, no hacía ruido, pero dejaba una estela de humo blanco."

Hasta ese día, el matrimonio Rodriguez se habia reído mucho de "los locos que veían OVNIs", pero forzosamente cambiaron de parecer. Y este avistamiento sería tan sólo el principio de una jornada muy agitada.

Poco después de este episodio, pasadas las 8:30 de la mañana, pudo verse un despliegue militar en las zonas aledañas. Varios automovilistas y camioneros observaron un convoy de camiones del ejército apresurarse por la ruta. Algunos se adentraron a campo traviesa.



Cada quien pasó a ocuparse de sus asuntos, pensando que se trataría de algún entrenamiento o de maniobras militares.
Pero a primeras horas de la tarde sucedería otro episodio, aún mucho más extraño de lo visto hasta entonces.

Las hermanas Lilián y Valquiria Silva, junto a su amiga Katia Andrade, irrumpieron entre gritos en casa de las primeras, totalmente aterradas. Cuando la madre de las hermanas logró calmarlas un poco, las chicas le contaron que "habían visto al Demonio".

Naturalmente, la señora no creyó semejante disparate, por lo cual decidió ver por sí misma. Pese a los ruegos de sus hijas y la amiga, insistió en que la llevaran al sitio donde habían visto algo raro. Y llegadas allí, la mujer vio algo que la dejó sin habla: una espantosa criatura acurrucada contra una pared, yaciendo con un fuerte olor a amoníaco.



Luego describirían al ser en forma por demás elocuente:

"No era un animal ni tampoco una persona. Era una cosa horrible. Tenía un cuerpo pequeño y grasoso o gelatinoso, de color más bien oscuro. Lo peor era su cabeza, con tres protuberancias como cuernos. Y sus ojos eran rojos, sin párpados y enormes."

Fueron cuatro las mujeres que esta vez volvieron corriendo a la casa. Intuyeron que la criatura que habían visto estaba herida, fuese lo que fuese. Parecía no poder incorporarse y padecer dolor.
Pero no se quedaron para averiguarlo.

Al llegar a la casa, la señora dio aviso a la Policía. Pero de acuerdo a lo dicho por vecinos y curiosos posteriormente, el ejército llegó primero. Por medio de una red atraparon al ser y lo subieron a un camión.

Y eso fue lo último concreto que se supo de todo el asunto.

Por supuesto, las noticias se filtraron y la prensa se hizo presente, así como algunos investigadores.
Tanto los Rodríguez como las chicas y su madre fueron entrevistadas, así como mucha gente que dijo haber visto lo que seguramente no vio y haber estado donde seguramente no estuvo.
Pero los testigos iniciales y verdaderos mantuvieron lo dicho en todos sus términos.



La primer explicación oficial consistió en no dar explicación ninguna. Pero como la opinión pública no se acallaba, hubo que hacer declaraciones. Y vaya que se hicieron.
De acuerdo a las autoridades, en Varginha no pasó nada de nada.

La "criatura extraterrestre" sería en realidad un pobre muchacho de la ciudad, conocido por todos como Luizinho, que padece severos problemas mentales. Sucio y embarrado, se habría acurrucado contra la pared y entonces las muchachas se confundieron al verlo y se asustaron.

En cuanto a la actuación del ejército, fue explicada de esta forma: los vehículos militares fueron enviados a otra ciudad para entrar a taller por mantenimiento. Todos juntos. Y eso fue el convoy que se vio en la ruta.

Creo que estas "explicaciones" no explican nada. Tanto las muchachas como la señora conocían perfectamente al pobre Luizinho, que por cierto no tenía las características que describieron.
El mantenimiento de los camiones militares no tiene nada que ver con que anduvieran a campo traviesa (a menos que quisieran romperlos un poco antes de llevárselos al tallerista).

De lo visto por los Rodríguez, nada pudo ser explicado. Y de los soldados echando redes supuestamente sobre el desventurado Luizinho, tampoco se dio explicación alguna.

Demasiadas preguntas quedaron sin contestar.

jueves, 24 de noviembre de 2011

¿JOHN TRAVOLTA EN 1860?


Todos ustedes conocerán a John Travolta, seguramente. Actor que se hizo famoso no actuando demasiado bien, gracias a filmes como "Saturday night fever" y "Grease", productos vistosos y amparados en bandas sonoras y coreografías.

Después, cuando el tiempo pasó y ya no pudo oficiar de "muchacho bonito", tomó la opción que le quedaba: actuar mejor. Y no le fue mal.

Ahora vuelve a ser noticia, gracias a otra situación similar a la que contamos por aquí para Nicholas Cage: una foto de 1860 está a la venta, bajo la presunción de que se trata de John Travolta quien fue retratado.

Aquí la ven:


El vendedor de la foto es un ciudadano canadiense, que esta vez no se apoya en la idea de que Travolta sea un vampiro (como en el caso de Nicholas Cage). Su explicación es diferente:

“Para aquellos de ustedes que no sepan, John Travolta es un cienciólogo y muchos cienciólogos creen en la existencia de algún tipo de reencarnación. Por supuesto, un viaje en el tiempo tampoco se puede descartar”

Creo que, personalmente, prefería la "explicación" del vampiro.
En fin, la cuestión es que se puso a la venta la foto en eBay, por un precio bastante módico en relación al que se pidió por la de Nicholas Cage: hablamos de cincuenta mil dólares y se la lleva.

Por mi parte, paso.

lunes, 21 de noviembre de 2011

DISFRUTANDO DE LA FERIA


No se puede negar que, para el año 1916, la señora Edith Oliver era lo que se dice una chica de avanzada. Viajaba sola y, por si fuera poco, manejando su propio auto.
Con la finalidad de visitar amigas, cierto día de octubre de ese año emprendió el viaje desde Devizes a Swindon (Inglaterra).

Puesto que el tiempo no la apremiaba en absoluto, Edith decidió viajar de la forma más placentera posible. Si le apetecía desviarse un poco de la ruta y conocer algún lugar, lo haría. Si quería pasear por algún sitio en particular, lo haría.

En esos tiempos, se ve que ir de un lugar a otro no consistía en subirse a un auto y emprender un rush digno de "Rápidos y furiosos" sin mirar a los costados. Edith se tomó su tiempo.


Uno de los sitios que Edith quiso conocer en su trayecto fue Avebury. Se había desviado de la ruta principal para tomar caminos secundarios y luego simples sendas vetustas, desde las cuales se veían antiguos megalitos que se encuentran en la zona.

Finalmente, llegó a la población de Avebury casi a la noche. Lo primero que le llamó la atención fue una feria que se estaba llevando a cabo. Edith circuló por una avenida de piedra, con su coche prácticamente a paso de peatón. Eso le permitió observar los kioscos, los comercios, las atracciones, las familias disfrutando de todo el espectáculo.

Lo que vio le gustó. Lo suficiente como para decidir volver algún día y disfrutar ella también de la feria de Avebury. Así se lo comentó a sus amigas cuando llegó a Swinton. Y tanto las entusiasmó que decidieron visitar ellas también esa feria algún día.

Las vicisitudes de la vida hicieron que recién nueve años después, en 1925, pudieran Edith y sus amigas emprender esa excursión que habían programado. Pero al llegar a Avebury les esperaba una sorpresa.


Unas calles vacías mostraban un panorama muy distinto del deseado. Pero Edith no perdió la esperanza, pues no había logrado aún ubicar la avenida por la cual había manejado en 1916. Seguramente la feria se encontraría allí. Era cuestión de preguntar.

Y preguntaron, claro que preguntaron. En varios comercios, a varias personas, hasta en la alcaldía incluso.

La respuesta, siempre la misma, las dejó petrificadas: desde 1850, estaban prohibidas las ferias en la población de Avebury. Quien quisiera montar una feria, debía instalarla en las zonas rurales.
Y la avenida de piedra por la que había manejado su auto...no existía desde el año 1800.

El caso fue estudiado por la Society for Psychical Research y por diversos investigadores de ese campo, que no pudieron encontrar explicación alguna. Permanece como un misterio.

sábado, 19 de noviembre de 2011

¿DE DÓNDE VINO RAY?


A la izquierda de la imagen, vemos al joven que se identifica a sí mismo como "Ray", aparecido de la nada en Berlín según ya contamos en este post.
Dos meses de investigación han permitido a la Policía alemana determinar que el muchacho es sincero en sus declaraciones, pero esto no implica que se haya avanzado mucho en el entendimiento del caso.

Para empezar, si bien el joven habla inglés, los expertos que intentan esclarecer su procedencia a través de su acento, se hallan desconcertados. Ni siquiera han logrado establecer si podría ser británico, estadounidense o, por caso, australiano.

Tampoco pudieron identificar la situación inicial que describió el joven como detonante del caso: aparentemente, su madre (de nombre Doreen) habría muerto en un accidente de tránsito, por lo cual su padre (llamado Ryan) decidió aislarse en el bosque con él, que apenas tendría unos doce años.
Lo cierto es que nadie pudo ubicar el episodio concreto que concuerde con esa trama, pese a que la noticia recorrió el mundo y, quizás, algún pariente o amigo de la familia pudo aportar datos.

El tercer inconveniente surge a partir de la identificación de los bosques mencionados por el muchacho.


De acuerdo a los expertos consultados por la Policía, sólo hay dos posibilidades para situar esos bosques concretamente: o bien se trata del Bayerischer Nationalpark o de la región de Erzgebirge, ambos sitios ubicados al sur de Berlín.

Pero allí aparece un problema concreto: hay cuatro meses al año en los cuales sería imposible encontrar comida en esos bosques. Estamos hablando de sitios que quedan cubiertos por una gruesa capa de nieve y, en los cuales la única fuente alimenticia concreta sería la caza de un jabalí (cosa bastante peligrosa) o la búsqueda de gusanos bajo tierra. Eso si se tiene mucha suerte y si uno mismo no se convierte en fuente alimenticia de otros (caso de los lobos).

También resulta extraña la afirmación del joven, acerca de que padre e hijo nunca se cruzaron con otras personas en el bosque, en los cinco años que pasaron allí. Esto es francamente inconcebible, teniendo en cuenta que el muchacho indica que vivían en constante movimiento, acampando allí donde la noche les sorprendía.
Además, debe tenerse en cuenta que esos lugares son frecuentados ampliamente por deportistas, montañistas, esquiadores, gente que para en los resorts, etc.

Tampoco se pudo ubicar la tumba del padre, que según Ray falleció al caer de un risco.

En suma, el episodio sigue siendo un completo misterio. En pleno siglo XXI, con todos los medios disponibles, nadie ha podido determinar quién es Ray o de dónde vino.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

UN PINTOR MUY ESPECIAL



Admitamos que esta no es la imagen que usted esperaría de un pintor. Pero sucede que Augustin Lasage (1876-1954) no fue un artista común y corriente.
En realidad, nadie esperaba que Augustin se convirtiese en pintor. En todo caso, él menos que nadie.

Nacido en el norte de Francia en una región minera, ya a sus catorce años estaba trabajando en una mina de carbón. Durante su juventud, esta actividad laboral sólo se vería interrumpida por un breve período en el cual debió cumplir tareas en el ejército.

Pero en 1911, cuando Augustin ya tenía treinta y cinco años, veinte de los cuales había pasado como minero sin manifestar vocación artística alguna o talento para ello, sucedió algo completamente inexplicable.
Una tarde en que se encontraba trabajando solo en una parte aislada de la mina, oyó con claridad una voz femenina que le decía:

"Un día, tú serás un gran pintor"

Augustin quedó estupefacto. Se quitó el casco, se apoyó en la pared del túnel para tomar un respiro y pensó que la fatiga le habría jugado una mala pasada.
Pero apenas se aprontó para retomar su labor, se escuchó otra vez la misma voz que repitió:

"Un día, tú serás un gran pintor"

Y con Augustin ya en total estado de alerta, la misma frase fue repetida una tercera vez por la misma voz.

Supongo que cada persona reaccionaría en forma diferente ante semejante experiencia. Augustin reflexionó sobre el asunto y concluyó dos cosas bien extrañas: por un lado, atribuyó la voz a la de su hermanita, fallecida siendo niña pequeña. Por otra parte, decidió convertirse en pintor.


El estilo pictórico de Lesage resultó ser extremadamente avanzado para la época. Al principio, continuó trabajando en la mina y pintaba después de su jornada laboral. Dudaba de su valor como artista. No lograba terminar nada.
Pero incidentalmente se introdujo en círculos espiritistas, que por entonces estaban en pleno auge. Y fue allí donde, de alguna manera, encontró confirmación a sus ideas. Durante las sesiones espiritistas, recibió "comunicaciones" que provenían de diversas fuentes.

Básicamente, los mensajes afirmaban que su hermana era quien le había hablado y que habría de convertirse en artista de una forma bastante especial: a través de los espíritus.

"Las voces que escuchaste son reales. Tú serás un gran pintor, no tengas miedo y sigue nuestros consejos. Nosotros haremos los trazos a través de tus manos. No intentes entender."

Esta vez, Augustin no dudó. Y finalizó su primer pintura:



"Las voces" le indicaron a Augustin qué colores, pinceles y mezclas debía usar. Hasta el tamaño del lienzo fue ajeno a la decisión de Lesage: encargó a un amigo que comprase uno de pequeñas dimensiones, pero éste confundió las medidas y se apareció con un lienzo de tres metros cuadrados.
Augustin se aprestó a cortarlo en trozos menores, pero "las voces" le dijeron que lo dejara así.

Y continuó pintando:





Lamento no poder poner imágenes más grandes en el post, porque es increíble el detalle y la simetría de estas composiciones. En cuanto a la técnica empleada, Lasage siempre afirmaría que él no pintaba nada, que su mano era guiada por otros.

Quienes lo vieron trabajar, afirman que lo hacía sin bosquejo previo alguno y con extraordinaria rapidez.
Visto así, se puede decir que fue un precursor de algunos métodos (si pueden llamarse así) que los surrealistas emplearían: el dibujo y la escritura "automáticas", provenientes del subconsciente.



Lo cierto es que el artista se abrió paso poco a poco en el mundo de la pintura. Producía obras muy originales, siempre dentro de su peculiar estilo. Y se produciría otro episodio enigmático en su vida.

Hacia 1937, Augustin se vio asaltado por sueños recurrentes acerca de la vida en el antiguo Egipto. Puesto que se repetían una y otra vez, decidió usarlos como tema para su trabajo. Así fue realizando diversos cuadros que introducían símbolos y figuras con arreglo al arte egipcio antiguo.

Una de esas pinturas se tituló "La cosecha en Egipto". Tras terminarla, Lasage sintió una inexplicable necesidad de visitar Egipto a como diera lugar.
En principio, esto no suena tan raro como pudiera parecer. Cualquier persona con sensibilidad por el arte (sea o no un artista) gustaría de ver por sí mismo los antiguos monumentos de ese país. Y allí se dirigió él.

Lo que sí resulta extraño del asunto es que insistió en llevar consigo "La cosecha en Egipto". Según dijo, por indicación de "las voces".
En 1939 partió a Alejandría, luego visitó El Cairo y finalmente Luxor.  Estando en este sitio fue que sucedió algo completamente inesperado: Lasage y sus acompañantes visitaron una tumba antigua donde se hallaba un muro pintado que mostraba lo mismo que se veía en "La cosecha en Egipto", con asombrosa similitud.

Demasiado para ser casual. Lo cierto es que la tumba visitada por Lasage fue descubierta en 1905 y sus diseños figuraban en un libro editado en 1930, de modo que el pintor francés pudo tomar conocimiento de ellos a través de ese canal y no de "las voces". Pero la duda siempre quedará.

Veamos algunas de sus pinturas egipcias y detalles de las mismas:





En total, el artista produciría unas 800 obras de variada gama temática. Desde diseños casi geométricos hasta escenas del Egipto antiguo, pasando por motivos de Creta u Oriente Medio.
Su paleta no cambiaría mucho, en cambio.

Pintó hasta 1952, cuando diversos problemas en la vista le impidieron continuar con su arte. Hoy en día, sus obras integran museos y colecciones particulares. Aunque no sé si decir "sus obras" o, en su defecto, "las obras de sus voces".

En todo caso, fue un pintor muy especial.

sábado, 12 de noviembre de 2011

EL EJERCITO FANTASMAL


Amigo/a lector/a de este blog, voy a hacerle una pregunta sencilla: ¿qué le parecería a usted si alguien autorizara a hurgar tumbas para que la gente se entretenga?

Grotesco, lamentable, sin justificación alguna, ¿verdad? Pero resulta ser que, en ciertos casos, la respuesta no es tan clara. Por lo menos, eso es lo que viene aconteciendo desde décadas en la laguna de Truk, donde se bucea entre lo que serían, propiamente, tumbas.


Las islas Truk son un pequeño archipiélago (o más propiamente un atolón, en este caso), donde los japoneses tenían una importante base en la Segunda Guerra Mundial.
En febrero de 1944 los estadounidenses atacaron la zona y acabaron con todo. Un par de cruceros, varios destructores y un enorme número de barcos de transporte fueron hundidos. Las bajas humanas fueron cuantiosas.

Los años pasaron y los muertos no pudieron descansar. La zona atrajo buceadores en plan turístico.
Cualquiera puede acudir y pasearse por los restos de los barcos, el material bélico hundido, los aviones derribados y demás restos.

Veamos unas fotos:








Como siempre, el problema con este tipo de lugares es que no se puede esperar una conducta uniforme de parte de sus visitantes ocasionales. Habrá quienes respetan y habrá, inevitablemente, quienes creerán que están en una especie de parque temático o cosa parecida.

El resultado fue que, más pronto que tarde, hubo personas que empezaron a tocar y cambiar de sitio los restos humanos que allí se encuentran. ¿En busca de qué? Pues tratando de sacarse una "fabulosa" foto para mostrar a los amigos o colgar en la web...



....o también en un intento de lograr esa imagen "de miedo" para plasmar en una foto:


El asunto es que parece ser que este "ejército fantasmal" decidió contraatacar. Se han recogido informes acerca de buceadores "jocosos", que se jactaban de haber revuelto huesos durante su inmersión y han desaparecido sin dejar rastro alguno.

Lo que comenzó como "cuentos de marineros" fue ganando terreno hasta el punto de desembocar en investigaciones periodísticas. Como resultado, se sabe que algunos buzos irrespetuosos desaparecieron en el curso de sus expediciones.
Más aún, según parece hay un "conteo fantasmal" de cada intruso eliminado: se afirma que cada vez que desaparece un buceador, aparece algo extraño entre los restos hundidos: una máscara que no estaba antes allí.

Se trata de máscaras de gas de tipo militar. Diversos buzos han afirmado que aparecen en sitios donde antes no había nada y que su aparición concuerda con la desaparición de algún gracioso. En la siguiente imagen se pueden ver dos de ellas:



Y en la próxima foto se aprecia una a la derecha y abajo de la imagen:


Los viejos habitantes de las islas no tienen problemas para creer que la mala acción de algunos buceadores ha generado una respuesta de índole fantasmal.
Entretanto, las autoridades no quieren por nada del mundo cortar el flujo de turistas. No han declarado casi nada sobre este tema. ¿Cuál es su explicación para las desapariciones?

Ésta:


El sitio es muy apropiado para el buceo, pero está poblado por buen número y variedad de tiburones que, naturalmente, pueden representar un serio problema.
Quizás sea esa la causa de las desapariciones y, en cuanto a las máscaras de gas, puede que las corrientes las muevan y cambien de sitio.

O puede ser que el ejército fantasmal haya reclamado estar en paz.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

MALDITO CONQUISTADOR


Si nos referimos puramente a sus virtudes como película, "El conquistador de Mongolia" ("The conqueror"), film del año 1956, no ofrece material como para pasar a la historia del cine (piénsese en lo disparatado que es el intentar que John Wayne personifique a Gengis Kan).

Pero la cuestión es que la película se transformaría de por sí en una leyenda urbana: se afirma que la mitad del personal interviniente en ella murió de cáncer a medida que los años fueron pasando.

Vamos a ver qué hay de cierto en esta historia.


Esta película nació como una "superproducción" en la mente de Howard Hughes, entreverado por entonces en el negocio cinematográfico. Hombre que pensaba en grande, Hughes puso la (mala) idea y largó todo el fardo en manos del estudio RKO.

Dinero no era lo que faltaba, de modo que contrataron a John Wayne para hacer de Gengis Kan (más o menos, como que me pongan a mí para hacer de Bruce Lee). Y como había que darle un toque romántico a la historia, se necesitaba una coprotagonista. Otro montón de dinero sobre la mesa y, por arte de magia, consiguieron a Susan Hayward para hacer de "princesa tártara" (otro disparate).


Los maquilladores se encomendaron al cielo y pusieron manos a la obra. John Wayne les quedó más parecido a un integrante de Village People que a un conquistador mongol, pero ya todos estaban jugados, así que no hubo vuelta atrás.
En cuanto a Susan Hayward, se ve que los mandó a todos a freir espárragos. Aparece tal como era y punto. No me vengas con princesas tártaras, pibe.

Y el tercero en discordia (que quería quedarse con el liderazgo de Gengis Kan, la chica de Gengis Kan y hasta el triciclo de Gengis Kan) era un tal Jamuga, papel que fue adjudicado a Pedro Armendáriz.


Definitivamente improbable como mongol, Pedro Armendáriz era un actorazo que (me atrevo a decir) fue el único que no naufragó en el proyecto.
Y los actores de reparto incluyeron a unos cuantos de esos que todo director quería tener para un protagónico: Lee Van Cleef, Agnes Moorehead, William Conrad y varios más.

El director fue Dick Powell, que tuvo carrera más extensa como actor y productor (en cine y TV) que como director. Y con razón, porque después de este trabajo, mejor se dedicaba a otra cosa.

Como sea, allá marcharon todos a una locación en St. George y dieron comienzo a la filmación. Pero quiso el destino que el sitio estuviera a unos 200 kilómetros de un campo de pruebas donde, hasta un año atrás, se habían llevado a cabo testeos de armas atómicas.

El equipo de filmación y los actores pasaron bastante tiempo en el sitio y todos los datos permiten suponer que se vieron afectados de alguna manera por la radioactividad residual.
En apariencia, de las 220 personas que integraban el grupo humano que participó de la filmación, sucedió que 91 contrajeron algún tipo de cáncer a posteriori.

A esto pueden sumarse también algunas personas que simplemente estaban allí para acompañar a otros. Tal sería el caso de un hijo y un hermano de John Wayne, asi como de un hijo de Susan Hayward. Y tanto los protagonistas como el director vendrían a acrecentar esa desgraciada lista.


Presumo que la verdad concreta no va a saberse nunca. Para peor, como los tiempos apremiaban, Howard Hughes mandó traer 60 toneladas de tierra del sitio contaminado a los estudios de RKO, a fin de preparar el set para escenas especiales.

Algunos médicos han calculado que el número máximo de afectados por esa enfermedad en un grupo humano de ese tamaño, sería normalmente de unas treinta personas. Por lo cual hay que suponer la existencia de factores externos. Y la contaminación del sitio es la causa más probable.

En su momento, la película fue un desastre de taquilla y recibió una lluvia de palos de la crítica.
Poco después, Hughes abandonó el negocio cinematográfico, no sin antes comprar este filme con la finalidad de impedir que continuara a futuro su exhibición en cine o TV.

O sea, era una película maldita por donde se mire.